Descripción
¿Todavía no conoces a Amanda Black?
No te pierdas la segunda entrega de la nueva serie para niños de Juan Gómez-Jurado y Bárbara Montes que está arrasando. Aventuras repletas de misterio, acción trepidante y con un ritmo frenético.
Lord Thomas, toda una institución en la ciudad, reclama a los Black que le devuelvan un amuleto familiar, un brazalete que robaron hace años por el bien de todos.
Sin embargo, el amuleto ya no está en manos de la familia de ladrones. Cuando la tía Paula le confiesa a Amanda que su bisabuela regaló el brazalete años atrás, elaboran un endiablado plan para recuperar la joya. Amanda y Eric seguirán la pista del brazalete hasta una mansión encantada, mientras que Paula se embarcará en un peligroso viaje con lord Thomas para evitar que descubra la verdad.
¿Logrará Amanda salvaguardar el honor de la familia Black?
Reseña:
«A medio camino entre la novela negra y la de aventuras, y cargada de un fi no sentido del humor, se lee con el vértigo y la necesidad de saber más que imponen los thrillers. La adicción lectora está asegurada.»
Adrián Cordellat, El País
Madrileña de nacimiento, Bárbara Montes es una psicóloga infantil que también se dedica a la escritura tanto de libros infantiles —en colaboración con Juan Gómez-Jurado— como de novelas.
En el campo de la psicología se ha centrado en el estudio y tratamiento de los problemas de atención. Fue esta materia la que abordó en su primer libro infantil.
Juan Gómez-Jurado es un aventurero intrépido y decidido, que descubrió el secreto de los zarkianos y la verdad sobre el universo, y luego volvió para contárnoslo. No hagas caso a los rumores que dicen que se lo ha inventado todo: son falsos. Como muy bien sabes, todo lo que se cuenta en estos libros es verdad. Juan nació en Madrid en 1977 y tiene dos hijos, a los que empezó a contarles las historias de Alex hace tiempo. Ellos lo obligaron a escribirlas. Juan también ha escrito muchas novelas para mayores, que todavía eres un poco joven para leer. Al igual que Alex, es adoptado y no sabe quiénes son sus padres de verdad. Quizá lo hayan secuestrado los chubis alguna vez.
